viernes, 26 de septiembre de 2014

LA GUERRA ETERNA

Ver imagen en Twitter

El debate producido en septiembre en EEUU y Europa sobre qué hacer con ISIS es, cuando menos, sospechosa.

Supone para la Administración norteamericana una forma excelente de vender a una opinión pública reticente la idea de implicarse militarmente en la guerra siria. Es también una forma de justificar legalmente los ataques en ese país.

Las operaciones en Irak están cubiertas por el hecho de que el Gobierno de Bagdad ha pedido ayuda. No ha habido tal petición desde Damasco. Pero atacar a un grupo que es parte de Al Qaeda dentro de Siria tiene la ventaja de que permite usar el argumento de que el Congreso ya dio la autorización pertinente después del 11S. Esa aprobación es un chicle que se ha extendido a lo largo de los últimos 13 años para atacar objetivos relacionados de una forma u otra con Al Qaeda por todo el planeta. Son las ventajas de la guerra que nunca terminará.

En Irak no hay aviones extranjeros que puedan sustituir las funciones de un Estado fallido. ISIS no será expulsado de Mosul o de Faluya a menos que el Ejército iraquí pueda intervenir sin ser considerado una fuerza de ocupación por la población local.

ISIS ha prosperado gracias a la falta del legitimidad del Gobierno de Bagdad y a la corrupción de sus fuerzas militares y de seguridad. Sin solucionar esos problemas, no habrá opciones de cambiar la situación sobre el terreno.

A decir y condenar, tambien los asesinatos que estos grupos han hecho sin ningun tipo de misericordia.

esto continuara